Noticias de Bolivia. En las últimas horas fueron publicadas varias fotografías de Gabriela Zapata en escenas de coqueteo con su abogado Walter Zuleta.

"Una de las pruebas del complot armado contra Eduardo León y miembros de la oposición, aquí Gaby con su otro abogado 'prófugo' Walter Zuleta, ¿alguien duda que Zapata y sus otros dos 'abogados' armaron todo esto para incriminar a León y ahora a la oposición?", señala el texto que acompaña las fotografías en Facebook.

Gabriela Zapata Montaño, es la protagonista de una novela nunca antes vista en la historia política de Bolivia, culebrón al que fueron arrastrados el mismo presidente Evo Morales, algunos de sus ministros, empresarios chinos, políticos oficialistas y opositores, así como abogados, de los pocos que se conocen.

La mujer hizo gala de sus gran capacidad seductoras, así lo demuestran los distintos capítulos de su novela, de idas y vueltas, de afirmaciones "temerarias" y contradicciones que fueron ventiladas en los informativos y publicaciones de Bolivia, desde el mes de febrero del presente año.

Zapata, al parecer, no tiene escrúpulos en cambiar sus versiones: de acusar inicialmente a funcionarios del Gobierno de Morales, ahora a pasado a sindicar a políticos de la oposición del "complot" político derivado de la revelación efectuada por el presentador de televisión Carlos Valverde.

En dos declaraciones continúas el fin de semana fiscal Ramiro Guerrero afirmó que con base en la declaración a los fiscales el pasado miércoles, Gabriela Zapata, sostuvo que fue Eduardo León quien organizó todo y que el papel de Zuleta se limitó a la venta de un vehículo para financiar la contratación de un niño, quien aparecería como el hijo de Morales.

Los argumentos del Ministerio Público parece que no llegan a consolidarse, porque este caso está lleno de sorpresas, que parecen escapar de las manos de los fiscales que investigan el denominado popularmente "Zapatagate".