Un juez determinó la detención preventiva de Boris Vásquez Flores, de 41 años, líder de una red de trata y tráfico de tres mujeres de Paraguay que operaba desde la barra americana Black Cat, ubicada en el municipio de Quillacollo, de Cochabamba, informó el martes el director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen, Gualberto Díaz.

"El principal autor de este hecho ha sido recluido en el penal de San Pablo de Quillacollo", informó en una conferencia de prensa.

El implicado fue aprehendido el 24 de enero cuando se intervino su negocio, porque una de sus víctimas huyó del lugar y fue a la ciudad de La Paz para denunciar a la embajada de su país que era retenida ilegalmente y obligada a prostituirse.

Según Díaz, dos empleados de Vásquez que fueron arrestados en ese operativo policial, un garzón y un guardia de seguridad, quedaron libres de cargos en el caso.

Agregó que las tres ciudadanas de Paraguay rescatadas retornaron a su nación en los últimos días, con el apoyo legal y diplomático de su embajada.

"Hubo un anticipo de prueba", dijo sobre el recurso legal que permitió que las mujeres puedan retornar a su tierra de origen, mientras continúa el proceso legal contra el implicado principal en el caso.

La autoridad mencionó que la investigación policial contra Vásquez continúa porque aún debe identificarse y aprehenderse a sus cómplices en Bolivia y Paraguay, entre ellas algunas mujeres dedicadas a captar víctimas y trasladarlas a territorio boliviano.