TIERRA NOTICIAS. El cáncer de cuello uterino es la primera causa de muerte en mujeres adultas en Bolivia, cada día fallece entre 4 a 5 por esta enfermedad. Con la aplicación del protocolo de braquiterapia nace una esperanza de vida para las pacientes que tendrán un tratamiento que reduciría el tiempo de recuperación en fases no operables en los que el pronóstico de vida es reducido.

Cabe recordar que la braquiterapia es un procedimiento de radiación focalizada que consiste en poner unas agujas o semillas radioactivas al interior de la vagina con la finalidad de irradiar al tumor y no así a la piel ni a los tejidos.

“El protocolo está indicado para mujeres donde la cirugía ya no es una alternativa y que se encuentran en etapas intermedias o avanzadas. Consiste en un tratamiento revolucionario porque reduce el tiempo de terapia de 3 meses a 28 días, mejorando la posibilidad de cura y reduciendo la tasa de mortalidad”, explicó el oncólogo radioterapeuta Alvaro Martínez.

El especialista colombiano y sus pares bolivianos han desarrollado un proyecto denominado Remisión Bolivia-Unidos por ellas que beneficiará en forma directa a 194 mujeres que tienen este cáncer en fase no operable y que no cuentan con recursos económicos para un tratamiento de este tipo.

“El proyecto cuenta con el respaldo de instituciones públicas y privadas para cubrir los gastos que deberían ser pagados por los pacientes, pero aún es insuficiente pues se ha logrado obtener sólo el 50%. Aún resta conseguir el equivalente de 5 mil dólares por persona que no es accesible para muchas bolivianas y el objetivo es que no cueste nada”, enfatizó Martínez.

Se sumaron a esta causa las empresas como Oncoservice, Lotería Nacional de Beneficencia y Salubridad, Schmidts Pharma, Empresa Ifa, Hansa, Embriovid y Labclinics, entre otras que comprometieron su apoyo para lograr que estas mujeres de escasos recursos puedan tener una esperanza de vida y evitar que se desestructure su familia.

Reconocimiento Marie Curie

El oncólogo radioterapeuta hace un mes y medio recibió en Viena una distinción que tienen 8 personas en el mundo, la medalla de Oro Marie Curie por su aporte a la medicina en radioterapia.

“Cada 4 años se otorga este premio y somos 8 en el mundo los que hemos recibido el reconocimiento de la medalla Madame Marie Curie (inventora de la radioactividad). El que mis colegas me hayan escogido a nivel internacional me llena de felicidad y me compromete a seguir con el trabajo de investigación”, dijo el oncólogo.

Finalizó señalando que en Bolivia hay mucho por investigar, pero que por diversas razones no se cuenta con mucha investigación clínica, pese a existir mucha gente capacitada para hacerlo, no cuenta con recursos económicos para ello, pues una investigación cuesta alrededor de 700 mil dólares para un grupo reducido de mujeres que no están en condiciones de financiar estos montos.