TIERRA NOTICIAS. A diferencia de otros gobernantes populistas y de izquierda, el flamante presidente de México, Andrés Manuel Obrador, hoy rechazó en su discurso de toma de posesión, cualquier posibilidad de aspirar a una reelección.

“Pero también dejo en claro que bajo ninguna circunstancia habré de reelegirme, por el contrario, me someteré a la revocación del mandato porque deseo que el pueblo siempre tenga las riendas del poder en sus manos”, aseguró el Presidente mexicano, ante una gran concurrencia de mandatarios latinoamericanos concentrados en el Congreso nacional de ese país.

“En dos años y medio habrá una consulta y se les preguntará a los ciudadanos si quieren que el presidente de la República se mantenga en el cargo o que pida licencia, porque el pueblo pone y el pueblo quita, y es el único soberano al que debo sumisión y obediencia”, aseveró López Obrador, a tiempo de aceptar el reto, que él mismo se impuso delante de su pueblo.

El mandatario mexicano sustituye en el cargo a Enrique Peñanieto, que deja un país afectado por las mafias del narcotráfico y la corrupción. López Obrador comprometió un trabajo de 16 horas al día y un rápido cambio en las políticas en su gestión

“Por eso aplicaremos rápido, muy rápido, los cambios políticos y sociales para que si en el futuro nuestros adversarios, que no nuestros enemigos, nos vencen, les cueste mucho trabajo dar marcha atrás a lo que ya habremos de conseguir. Como dirían los liberales del siglo XIX, los liberales mexicanos, que no sea fácil retrogradar”.

La posesión del presidente López Obrador contó con la presencia del Presidente boliviano Evo Morales, aspirante a una tercera reeleción presidencial.

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